Llevo un par de semanas guerreando con mis compañeros del trabajo porque no tienen ni idea de cine... y mira que para que lo diga yo tiene narices la cosa. Viendo las carencias y necesidades que tienen los pobrecillos en clasicazos del 7º arte, he decidido ayudarles y crear una nueva serie de post en plan ONG llamada Cine sin fronteras.
La primera entrada se la dedico a Balancín con todo mi cariño. A partir de ahora ya podrás decir que sabes quién es Iñigo Montoya.
jajja...este mario!!!con cariño!!!
ResponderEliminarpeliculón!
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